En los últimos años, Natura Mexicana, WCS y FCD han estado trabajando de forma independiente para minimizar las amenazas que se ciernen sobre las guacamayas rojas en la región de la Selva Maya. Se sabe que al finalizar la época de anidación en Guatemala, muchas de las guacamayas adultas y sus pichones migran hacia México, y luego regresan en la siguiente época de anidación. Es desconocido si existe el mismo patrón para las guacamayas en Belice, pero es probable.
Entre las amenazas, en su mayoría debidas a actividades humanas, a las que más están expuestas las guacamayas, se encuentran:
Tráfico Ilegal ​
Su belleza colorida poco común, además de hacerla atractiva para el turismo ambiental, ha propiciado que sea muy cotizada en el mercado internacional, con un valor estimado de entre 1000 y 2000 dólares estadounidenses (Wright, et al., 2001). No es difícil suponer que a esto se deba su alta vulnerabilidad, derivada del tráfico ilegal al que está expuesta.
Deforestación / Destrucción del hábitat
​La ganadería es uno de los agentes que mayor deforestación provoca. Otra amenaza es el cambio de uso del suelo para realizar actividades agrícolas, por ejemplo, el creciente establecimiento de plantaciones de palma aceitera. En general, el desplazamiento de personas hacia áreas de reserva y la ocupación de tierras que servirían para ganadería (Prensa Libre, abril 2017). Con ello las guacamayas rojas, que acostumbran construir sus nidos en los huecos de árboles frondosos para ocultarse de los depredadores, se ven confinadas a áreas reducidas o en el peor de los casos se quedan sin áreas para sobrevivir.
Incendios Forestales
Los incendios forestales son frecuentes en la etapa de verano. Constituyen una gran amenaza que atenta contra el patrimonio natural y cultural de la región. Causados más por negligencias que por situaciones naturales, los incendios forestales agravan la situación para las aves. El incendio no solo afecta los árboles donde están los nidos y pichones de las guacamayas, también destruye los árboles que son fuente de alimento, lo que representa más problemas para una especie de por sí vulnerable.
(Prensa Libre, agosto 2017)
Asentamientos Humanos Ilegales ​
La Selva Maya sufre alta presión por las actividades humanas. El crecimiento poblacional demanda nuevos espacios para vivienda y desarrollo de actividades económicas. El reto es usar estos espacios de manera legal y sostenible, pero sobre todo considerando que el hombre no es la única especie que requiere un sitio para vivir. Miles de especies, entre ellas la guacamaya roja, habitan en esta región y su permanencia debe ser prerrogativa básica de una sociedad "pensante".
